Amor y Vampirismo:
Culianu amplifica a Ficino utilizando la psicología de Jung[1]. Sigo su
línea interpretativa para ampliarla luego con el simbolismo astrológico. Dad que el pneuma.
Espíritu circula junto a la sangre forma en el citado espejo del sentido común las imágenes
arrastradas “que se transforman en fantasmas”. Culianu explica que si Eros actúa el fantasma
“ejerce una especie de vampirismo sobre todos los otros fantasmas y pensamientos del sujeto”
generando una posesión y desplazando toda la otra actividad psíquica del individuo,
concentrándose en forma obsesiva en un solo fantasma, el del objeto amado. “El amante
esculpe en su alma la cara del amado”(Am, II, 8).
Nos hallamos en presencia de los efectos sutiles más ligados al “otro ojo” en la Astrología
simbólica, el lado siniestro serpentino –lunar. La Luna en su carácter de reflejar la luz solar
gobierna los espejos. Ficino la tiene en la casa XII en Capricornio (conjunción a la cúspide) en
oposición a Plutón en Cáncer (VI) y trígono a Venus en Virgo (VII). Es en este espejo lunar que
el arquetipo inconsciente de Eros-(Plutón-Venus) se refleja poseyendo toda la actividad
psíquica con pensamientos obsesivos (Plutón- Venus en Virgo) denotando toda clase de
efectos mórbidos (eje VI/XII). De esta forma produce un efecto curioso ya que al ser poseído por
este complejo que Jung con justicia denominaría Anima, por su carácter femenino, en su
aspecto negativo dado sus efectos vampirescos (Luna-Venus-Plutón). El Anima posee al
sujeto desplazando al yo consciente, al sujeto mismo (Plutón-Luna haciendo quincuncio –
semisextil y Venus biquintil a Saturno natal , gobernante del Tema).
Culianu no podría expresar mejor el simbolismo astrológico:”De ahí que el sujeto desposeído
de su alma, ya no sea sujeto: el vampiro fantástico lo ha devorado interiormente”[2]
Pero dado el complejo entramado de aspectos entre planetas en Ficino, a los que a ese
cuaternio : Luna, Venus, Plutón, Saturno, se le suma el Sol, tamibén como regente del lugar del
otro (Desc. Leo) y vinculados con todos ellos (quintil, semicuadr., cuadratura y trígono
respectivamente), sumados a la peculiar disposición entre ellos: Saturno, reg. del Asc. en
domicilio, dispone a la Luna en Capricornio quien a su vez lo hace con Plutón en Cáncer. Éste
a su vez hace lo propio con el Sol en Escorpio, quien rige al Desc., reflejando una peculiar
concepción en Ficino.
Ese sujeto (Saturno, Asc) devorado por el vampiro fantástico (Luna-Plutón-Venus) es
transferido a él y se convierte en la imagen del Amado (Luna-Sol), es decir el sujeto se
transforma en objeto de su amor (Sol como regente deVII) volviéndose su esclavo (Venus en
Virgo semicuadr. Sol).
Por ello Culianu concluye: “las relaciones hetero-eróticas son , en el fondo , según Ficino,
una forma de narcisismo (Sol reg. de VII Cuadr Venus en VII). Cuando el objeto que ha
sustituido al sujeto le niega la capacidad de amarse a sí mismo, quitándole el espejo
pneumático sin el cual queda prácticamente reducido al no-existir, se puede decir que el amado
es el asesino de su amante”[3] (Saturno como regente del Yo- Asc. semisextil Luna –espejo-
en quincuncio a Plutón y cuadratura al Sol reg. de VII)
Esta enfermedad del Amor, este desplazamiento era curado si el otro (VII, Sol) devolvía la
sujetidad, al corresponder el Amor. Si esto no ocurría, el sujeto vagaba en un mundo oscuro
como sombras en el Hades mitológico(Luna- Plutón-Saturno).
Si consideramos esta misma vivencia y el circuito aplicado al temperamento melancólico
inspirado, nos lleva a las mismas vivencias. El sujeto perdido, extraído del mundo real, pero el
objeto de su Eros no es un ser humano sino el Furor divino, ya sea profético o apolíneo (Sol
en IX,reg. VII) o místico (Dionisios, conjunción Júpiter-Neptuno, en Leo VII, semiquintil Plutón) o
erótica como cópula con el Anima Mundi (Alma del Mundo, Venus-Luna); expresando , en
lenguaje psicológico moderno, la unión con el Anima en los estadios superiores (María- Sophía)
que también pueden poseer al sujeto con todo tipo de ensoñaciones arquetípicas, alejándolo
de la vida, pero integradas conducen al individuo a la más alta realización del arquetipo central:
el Sí- Mismo.
El Mal de Ojo y la Magia
Nos queda exponer aún un aspecto decididamente negativo, o sea
el mal de Ojo, el aspecto paralizante de la serpiente. La etiología es la misma según Ficino y
varios autores de la época (Cardano, Della Porta, Juan Wier, Leonardo da Vinci) Cito a Agrippa
de Netteshem en su filosofía oculta: “La fascinación es una fuerza que , partiendo del espíritu
fascinador , entra en los ojos del fascinado y se introduce hasta en su corazón. El espíritu es
pues el instrumejto de la fascinación, emite, por los ojos del cuerpo, unos rayos parecidos a él
mismo y lleva consigo la virtud espiritual. De este modo, los rayos parten de ojos legañosos y
llevan consigo el vapor del espíritu y la sangre corrompida cuando encuentran los ojos del que
mira y, por este contagio, estos ojos que miran quedan obligados a contraer la misma
enfermedad” (Da ocultta Philosophía, I, 65)
Agrippa (23/9/1486, Pavia, 3,24 AM) También tiene espectadas las luminarias: Sol-Luna con
Saturno conjunción Neptuno (sextil) y Plutón(sextil) respectivamente, mostrando el mismo
complejo Kronos-Wotan o temperamento melancólico inspirado. En este caso el regente de su
yo-Asc Virgo es Mercurio en Libra (sextil Venus en Leo), completando el cuaternio de dioses
planteados por Platón-Ficino. La posición de Venus en Leo en XII en trígono con Urano conjunto
a Júpiter nos refiere también a la disolución del Amor personal narcisista(Leo) en la Totalidad
(XII)[4] elevándose a los cielos, al Topus Uranus (Urano-Júpiter) o sea la Cópula Mundi. Pero
también nos ilustra otro aspecto que comenzará a desarrollar Ficino, pero que Agrippa y luego
Bruno llevarán a su esplendor: la capacidad de atraer (Venus) las fuerzas del Mundus
Archetipalis (Urano-Júpiter) para tener efectos sobre esta realidad sensible, operación realizada
por la consciencia vinculando ambos mundos (Mercurio en Libra, sextil Venus y sextil Júpiter-
Urano) denominada Magia.
Giordano Bruno[5] desarrolla al máximo las ideas de la magia erótica, no sólo para la relación
entre hombre y mujer, sino para la manipulación de los individuos y de las masas. Bruno
propone enseñar al manipulador como, a través del conocimiento del Eros, del deseo en todos
sus ámbitos: riqueza, poder, seguridad, amor, etc., manejar e impactar el aparato imaginario de
individuos o masas para cumplir los fines previstos. Para cumplir con ello el mago-manipulador
debía desarrollar un alto autocontrol para que como le recomienda al lector de su obra:
“procura no transformarte de operador en instrumento de los fantasmas”[6]
Siguiendo la línea de Ficino, la amplía, dado que para lograr introducir los “fantasmas” en la
psique del otro no sólo apela a la vista, sino también al oído. En las “Thesis de Magia XV, vol III
dice: “ la acción mágica tiene lugar por contacto indirecto (..) a través de sonidos y figuras que
ejercen su poder sobre los sentidos de la vista y el oído, imprimen en la imaginación ciertos
afectos que son de atracción o repulsión, de goce o repugnancia”[7]
recopilador de la tradición astrológica, y coincidiendo con la división médica actual (nariz,
garganta y oídos, otorrinolaringología) se lo atribuye a Tauro. Ambas son interesantes, desde
el punto de vista simbólico propuesto. Tauro es el complemento de Escorpio y ambos son los
constituyentes del Eros: deseo y pasión, dinero y poder, etc..Por lo tanto la vista y el oído son
las ventanas para alcanzarlos. En Saturno y el oído, la Palabra del Padre que es Ley y que
permite legalizar el deseo y la fantasía, como bien sostiene Bruno en “De Magia, III”: “ la fuerza
del imaginario se multiplica por dos cuando interviene la facultad cogitativa porque esta es
capaz de subyugar al alma”[10]
Provisto de estas herramientas este mago puede provocar y manipular los sentimientos,
esperanzas, deseos, miedos, odios y toda la gama de emociones del o los individuos. De allí
que Bruno equipara al “mago, médico o profeta”[11], con “la consecuencia-según –Culianu-
más evidente de las especulaciones de Bruno consiste en que toda religión es una forma de
manipulación masas.”[12]
Con estas ideas de Bruno y las deducciones simbólicas llegamos al punto opuesto
planteado por Mcluhan y Erasmo acerca del imperialismo de la vista y el poder político basado
en la fuerza coercitiva del águila solar. Bruno lo complementa desde lo introvertido, desde el
mundo psíquico lunar, o sea lo inconsciente, representado por la seductora serpiente,
mostrando una vez más como los opuestos se tocan....
continúa en la 5º y última parte
[4] Esta valorización de lo femenino en Agrippa se ve reflejada tambie´n en la defensa de una mujer perseguida por una turba y por el Inquisdor acusada de brujería, aún a costa de su vida. También en sus escritos aparece la defensa de lo femenino: “Dejemos ya de despreciar este noble sexo y de abusar de su bondad(...) Volvamos a entronizarlo en el lugar de honor y preeminencia (Venus en Leo)(...) y tratemos a las mujers con todo el respeto y veneración que se merecen estos ángeles terrenos (Venus en XII, trígono Júpiter –Urano). Citado en Baigent- Leigh, El Retorno de la Magia , Plaza y Janes,m Barcelona, 1999, pag. 173.
[5] No se sabe con exactitud la fecha de nacimiento de Bruno, comienzo de la primavera de 1548, existe una carta confeccionada por rectificación por Spicasc, pero a mi entender, en especial la posición de la Luna , no concuerda simbólicamente con la personalidad de Bruno., por ello no utilizo estos datos., aunque la conjunción Marte-Plutón en Acuario en el MC sería tentadora utilizarla para explicar la base arquetípica de la manipulación mágica de Bruno.
[10] Culianu I, loc. Cit., pag. 135
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